19 jun 2010

El triunfo de la humildad

Hoy voy a dedicar el post a lo que creo que debería ser el comportamiento del club y aficionados respecto a los jugadores. Voy a poner el caso más claro que he tenido ocasión de ver, el de Higuaín, recuperado fantásticamente para su selección.

¿Hay mejor reconocimiento que este?

Hace tiempo que es el ojito derecho de don Alfredo. Durante mucho tiempo me pregunte si sólo se identificaba con él. Hoy también es una de mis debilidades, lo reconozco, y admito sin tapujos que no tiene lo mágico del crack al uso, como Cristiano o Messi. No tiene su estrella pero hay algo especial en él. Tengo que decir bien alto que es un privilegio haber visto su crecimiento desde que llegó al Madrid. Es un jugador totalmente diferente.
Cuando aterrizó nadie un daba un duro por él, era el manta que venía con Gago. El primer gol que marco con el Madrid me llamó mucho la atención. Busca el pase de Cassano, le gana el cuerpo a cuerpo al defensa atlético y se interpone para definir fácilmente. El gol es el uso de su cuerpo, o más bien de su cabeza. Lo cual explica muchas cosas de lo que le ha pasado en años posteriores.

¿Hay algo más grande que un momento así?

Tiene solo 22 años y su evolución es tremenda, ya ha puesto al Bernabeu boca abajo varias veces, cada temporada supera a la anterior y cuando todo el mundo reconoce que parecía imposible. Esta pretemporada con CR9, Kaká y Benzemá parecía claro que no jugaría... destroza a todo el que se enfrente. La competencia siempre es sana. Ahí hay trabajo, trabajo y más trabajo. Siempre le sacan puntos débiles, que los tiene, y él los pule milagrosamente. Dicen que de ello tiene buena culpa su padre.
Lo mágico del Pipita reside tres pilares: que no parece tener techo, que tiene el don de ser el factor decisivo para bien o para mal, y finalmente su perseverancia. El primero de ellos es público y notorio, por ahora sólo le pido que utilice la cabeza para saber que se necesita en cada momento del partido (véase Lyon), que no es poco. El segundo un verdadero don que debe aprovechar porque sino le hundirá. Y el último factor es, en mi humilde opinión, el más interesante. Ninguneado por la prensa, la feroz competencia, la presión del equipo más importante del mundo, en plena dictadura raulista, con el público escéptico y basureado por Valdano. Llega Mou, ve algo en él y renueva pudiendo con todos. Es el triunfo de la humildad, eso es lo que tenemos que premiar y seguir exigiendo, algo me dice nos reserva algo muy grande.


1 comentario:

  1. Cristian no va a estar de acuerdo.

    A mi pipita me gusta, lo reconozco, por su capacidad para sobreponerse a las dificultades y vencer donde nadie pudo, y el caso baúl es el más claro ejemplo. No creo que nadie podría esperar que donde todos fracasaron el pusiera fin al dominio de la momia.

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