Os pido disculpas por no escribir nada durante la semana, por desgracia las obligaciones laborales y personales me tienen más ocupado de lo que quisiera. Así que aprovecho esta jornada de sabado para pasarme y mantener el blog a la espera de momentos mejores para escribir.
Revisando la semana parece que haya pasado mucho, en realidad ha pasado poca cosa, una semana de rutina animada podriamos decir. Comenzamos con el bochornoso espectáculo de Vallecas, habría que preguntarse por qué en esta Liga tercermundista se permite que un equipo se presente a un partido 45 minutos tarde y no se le den por perdidos los tres puntos, o a otro cuya responsabilidad sobre su estadio no le llega para garantizar la disputa del partido, no se le da el partido por perdido y se le sanciona con alguna multa económica y la pérdida de varios puntos, no solo no ocurre esto sino que además el partido se acaba disputando al día siguiente a la hora que el equipo local exige y sin tener garantizada luz natural. Preguntas cuyas respuestas nos hacen acercarnos más a una república bananera que a un estado europeo.
El partido se ganó porque tocaba, sin alardes, eficaces más que eficientes, éste comienzo nos está enseñando que Essien y Modric han venido para jugar y visto lo visto es una buena noticia, al menos como estímulo y recambio de garantías de algunos jugadores con un tono físico e incluso mental deplorable. Ah, jugó el tarzán de Camas, se montan unas historias por perderse un partido de una temporada de cincuenta entre Liga, Champions, Copa, Selección... dignas de estudio. Más vale que se pierda muchos más, lo agradeceremos al final de temporada y Ramos también.
Mediada la semana tuvimos la pachanga del trofeo bernabéu, llevamos años sin que se dispute antes de comenzar la temporada siendo más un estorbo que otra cosa, inexplicable que en lugar de disputar un partido de preparación con algún grande a precios populares en verano, ideal para turistas y para medir el nivel del equipo, acabemos jugando contra pseudo equipos (hasta combinados de la Major League Soccer) en Septiembre o incluso Octubre. La gracia estuvo en el saco de goles comandado por Kaká que le cayó encima a Millonarios. Quien crea en la resurrección de Kaká que se vaya olvidando, un jugador al que se le ha pasado el arroz, que le disputa el puesto a dos jovenes promesas, ya vigoroso presente como Modric y Ozil, sinceramente es inexplicable su presencia en el equipo, gravosa para las arcas como ninguna. Que los medios vendan la resurrección de Kaká está bien, vender periódicos o rellenar tertulias lo exige, yo como tengo un blog no necesito eso. Kaká vayasé. Dicho lo cual tengo curiosidad por ver como se podría desenvolver como centrocampista creativo y no como mediapunta, con la edad los jugadores tienen a retrasar su posición, el ejemplo de Pirlo es sumamente ilustrativo, quien sabe si la Kaka podría tener un partido de prueba en Copa del Rey haciendo de Pirlo antes de empaquetarlo definitivamente.
Lo último digno de reseñar es que el Barça vuelve a colocar un peon en la Federación Española de Fútbol, parece ser que Sandrusco Rosell quería, además de la independencia de Catalunya jugando la Liga del Estat espanyol, colocar algún que otro hombre en el entramado federativo, sinceramente me parece bien lo que hacen, viven en una propaganda constante enormemente parecida a la nacionalista, sus hombres en la FEF es algo normal, los del Madrid serían años de madridismo federativo, las broncas de Messi a sus compañeros son una muestra de seny, humiltat y valors, las de Cristiano una persona arrogante y mal compañero, y luego las declaraciones de su presidente no hay que tenerlas en cuenta, no hay que mezclar deporte y política, para eso ya tienen al Madrid, el equipo del gobierno. En fin lo de siempre. Al menos espero que la institución se muestre inflexible a calumnias de centrales lecheras y butifarreras.
Solo queda ganar y acudir al duelo contra el Barça con la mayor cantidad posible de puntos, allí es muy probable que empiece la temporada de verdad, o incluso que se acabe en alguna competición.